Homeland - La premiere de la cuarta temporada

Después del famosísimo final de la tercera temporada, todos estábamos ansiosos por saber qué iba a ser de Homeland en esta cuarta temporada. Desde luego, los de Showtime nos llevan haciendo saber durante meses que la historia iba a cambiar completamente, con Carrie llevando a cabo una nueva misión en un sitio completamente diferente. Pero aún así, todos nos preguntábamos... ¿Funcionará?



En mi opinión, la premiere de la cuarta temporada no deja dudas al respecto: sí, sí y sí. La serie vuelve llena de energía y completamente revitalizada, ha sabido dejar atrás toda la historia de Brody - o casi toda, porque ese niño que han cogido para que haga de la hija de Carrie es fuckin' identical a su padre, da hasta miedo - para centrarse en esta nueva misión de nuestra loca favorita. 





La temporada comienza con Carrie en un campamento base de Afganistán en el que dirige ataques drones contra los enemigos de los Estados Unidos que están en su kill list. Hasta aquí todo "bien". El problema comienza cuando uno de los ataques se lleva por medio a una boda entera y el video de uno de los supervivientes se difunde por internet, mostrando al mundo entero a niños, mujeres y ancianos bailando y divirtiéndose en esta boda hasta que caen los drones americanos - "technically they weren't drones..." -.

Obviamente, esto no es una gran noticia para los paisanos, que deciden cargarse a palazos al responsable de obtener toda esa información secreta, Sandy Bachman - que poco dura este hombre en cada serie que participa -, motivo suficiente para que manden a Carrie de vuelta a casa junto con Quinn, que parece estar en pleno síndrome de estrés postraumático, emborrachándose, acostándose con desconocidas y pegándole palizas al primero que ve. 

Y aquí es donde nos plantean el tema que dirigirá esta cuarta temporada de Homeland: Sandy Bachman estaba consiguiendo información valiosa para los Estados Unidos acerca de la ubicación de los sujetos de la kill list, pero lo estaba haciendo a base de traicionar a su país  intercambiando información confidencial, cosa que sabía Lockhart, el "nuevo" director de la CIA. Poco tiempo tarda Carrie en aprovecharse de la situación y chantajear a su jefe para que la mande de vuelta a Islamabad, dejando atrás a su hija. 

Obviamente, me falta por comentar ESA escena. Sí, sí, esa en la que Carrie casi se carga a Brody 2.0. (Frannie) ahogándola en la bañera. Vale que nadie esperaba que fuera a ser la madre del siglo (ponerla en el mortal asiento del copiloto en el coche o no tener la más mínima idea de cómo darle de comer son muestras de ello), pero estoy segura de que nadie se esperaba que se le fuera a cruzar por la cabeza una idea así. Por lo menos ha servido para que Carrie se asustara de sí misma y decidiera endosarle otra vez Frannie a su hermana y poner pies en polvorosa. 

Por último, tenemos un nuevo personaje que probablemente se convertirá en ese personaje misterioso que no sabemos para qué lado tira: Aayan, el superviviente de la boda, aparece al principio como una víctima más, una bastante sensata que prefiere no meterse en líos y que considera que atacar a los americanos en respuesta al ataque dron los pone a su mismo nivel (de asesinos). Pero claro, luego empieza a esconder en la casa de su novia un cargamento de una medicina llamada a-xeron y a recibir visitar sorpresas de gente con muy mala pinta en plena noche. ¿Será yihadista como su tío o es tan inocente como parece y simplemente se ha visto envuelto en medio de una guerra?

En conclusión, esta temporada podría suponer un nuevo y necesario comienzo para Homeland, ya que la historia de Brody con todos sus personajes estaba quemadísima y tanto Carrie como nosotros necesitábamos lo que los ingleses llaman un fresh start. Doy mi voto de confianza a esta nueva temporada y os animo a todos los que estabais indecisos acerca de si darle o no otra oportunidad a que la veáis. ¡No me defraudes, Homeland!